El camino de Zoe y Leiza no fue fácil desde el principio. En su primer enfrentamiento, se encontraron con una pareja de Tandil y Río Negro y lamentablemente cayeron derrotadas. Sin embargo, su espíritu combativo y su talento innato las llevaron a la llave B, también conocida como repechaje.

A partir de ahí, Zoe y Leiza comenzaron a mostrar su verdadero potencial. Con una determinación inquebrantable, ganaron cuatro partidos consecutivos, culminando en una emocionante final contra una pareja de Buenos Aires. En un partido reñido, lograron imponerse con un marcador de 3/6 6/0 6/4, demostrando que estaban listas para más.

Lo más notable de este logro es que Zoe, con sus 13 años, se convirtió en la jugadora más joven en participar en un torneo de esta envergadura. Su ascenso meteórico en el mundo del pádel es aún más impresionante considerando que apenas la semana anterior había salido campeona en un torneo de menores en Córdoba.

Ahora, Zoe se prepara para la segunda fecha del selectivo de menores que se llevará a cabo en Córdoba.