Eugenio, un maestro del arte en todas sus formas, mantiene una amplia trayectoria que abarca décadas en la industria del cine, la pintura y el teatro. Reconocido internacionalmente por su creatividad y talento; es un verdadero ícono cultural. Con una humildad asombrosa, nos abrió las puertas de su mundo con una calidez inigualable. Charlar con él es sumergirse en un océano de infinito de historias increíbles.

SOBRE ESTANCIA DE LA CRUZ

Ubicado en San Javier, el hotel Estancia de La Cruz fue creado por Eugenio Zanetti y su pareja, Sebastián Sabas, es mucho más que un lugar de alojamiento; es un verdadero santuario del arte que ha alojado a múltiples figuras muy reconocidas como el caso de Robert de Niro.

A partir de este enero 2024, el hotel abrió sus puertas al público, donde ofrecen visitas guiadas previamente reservadas, donde se permiten explorar sus fascinantes rincones.

“Hay un aspecto espontáneo en todo esto. No está planificado arquitectónicamente, pero está muy orgánicamente desarrollado. Había dos containers de 11 metros de largo que tenían mi casa de Los Ángeles, que decidí traer y es mucho más de lo que está acá. También hay una casa en Buenos Aires que tiene muchísimas cosas”, contó Eugenio mientras desayunaba un café.

EL VALOR DE LAS COSAS

“Esto de los objetos, puede parecer poco interesante, porque las cosas perecen cuando perece la gente. Los objetos significantes, cuadros, sillas, mesas, lo que sea, están juntados por alguien a quien les significan. Cuando esa persona no está, dejan de significar. Nada es particularmente valioso, ni siquiera el Óscar es valioso monetariamente”, reflexionó.

El hotel está repleto de decoraciones y piezas “traídas de diferentes partes del mundo, como Afganistán, Marruecos, etc. La mayoría son partes de escenografías que se han utilizado en películas de Hollywood. Yo lo veo a este lugar un poco como una escenografía. Una escenografía de la vida. Donde tengo un taller donde pinto, escribo, trabajo y vivo”, dijo.

SALIR AL MUNDO A JUGAR

Eugenio nacido el 19 de octubre de 1946 en Córdoba. Tuvo padres muy sensibles, “muy modernos para la época”. “Eran muy alentadores, muy abridores de puertas. Todo lo que uno necesita. Y yo abrí la puerta y fui a jugar”, dijo quien a sus 20 años salió manejando una casa rodante hacia Afganistán y otras partes del mundo.

Eugenio se radicó en Los Ángeles y trabajó en Hollywood desde la década de 1980 y allí vivió durante 30 años. Donde trabajó en películas como "Flatliners", "Last Action Hero" y "Restauración", por la que ganó el premio Óscar al mejor diseño de producción/dirección de arte en 1995. Una película con un elenco integrado por Robert Downey Jr., Sam Neill, Meg Ryan, Hugh Grant, Ian McKellen, David Thewlis, Polly Walker, entre otros. En su escritorio hay un ejemplar de su libro donde se muestran imágenes de aquel entonces junto a su discurso, mientras que el premio descansa en uno de los muebles que están detrás, listo para ser mostrado a las miradas curiosas que llegan al lugar.

Entre anécdotas con personajes de la talla de Owen Wilson, Julia Roberts y hasta Steven Spielberg, compartió con nosotros parte de lo que fueron aquellos años y el arduo trabajo del mundo del cine. Al ser consultado por los “éxitos”, Eugenio remarcó su apatía con esa palabra, ya que, “de treinta proyectos, cuatro salen. Ese es el propósito. Entonces, si querés hacer cuatro cosas, tenés que tener treinta proyectos. Representa mucho trabajo que salgan las cosas”.

En el mismo espacio son testigos de la charla una gran cantidad de cuadros gigantes que decoran la sala. Pinturas de su autoría que parecen ser de época con curiosos detalles propios del humor del artista, donde se ven cuerpos con celulitis y hombres halados con zapatillas de trekking marca Sálomon. Sobre el mismo escritorio donde está el libro de su vida, hay otro con bocetos de ropas para diferentes óperas en las que está trabajando. En sus dibujos se refleja minuciosamente cada detalle de sus diseños. Fue imposible no querer preguntarle por su fuente inagotable de inspiración, a lo que responde contando su cuento favorito, “es un cuento persa”, expresó. “Un niñito que lleva una vela encendida en la noche. Le preguntan, ¿de dónde viene la luz? El niño sopla la vela, se apaga, y responde: si me dice dónde fue, le digo”.

SU ACTUALIDAD CREATIVA

“Estamos preparando dos óperas para fin del año. Que parece muy fácil de decir, pero son extremadamente complejas. Porque yo hago la escenografía, la historia de las luces, las proyecciones y la puesta en escena. Es mucho trabajo. Y antes de eso, en el Teatro San Martín de Buenos Aires, vamos a hacer una obra, la primera juventud de Ibsen, se llama Manada de Lobos. Nunca se hizo en Argentina”, anticipó.

SU PROXIMA PELICULA

Se llamará Hora Mágica. “Trata de un pintor que se muere en el primer acto y va al otro lado. Es como Orfeo, pero al revés. Orfeo muere, y su amante, es llevada a la muerte. Y todo el problema de Orfeo es traerla a Brice al mundo de los vivos. En el caso de esta película, donde el protagonista también se llama Orfeo, su amante está vivo y él está muerto y quiere traerlo con él a la muerte. Es una comedia”, adelantó.

“Del lado de los muertos él no sabe quiénes son porque sufre el síndrome de muerte reciente, entonces no se acuerda quién es, ni quiénes son ellos. Y Madame La Mort, que es la muerte, (Geraldine Chaplin), le dice a los deudos que tienen una semana para que él se aclare quién es y quiénes son ellos. Pero no le pueden decir”, explicó. “He escrito un guion que es una comedia dramática donde lo más importante antes y después de morirse es el amor. Además, del silencio, como dice Shakespeare”, cerró.